El adiós a Francisco: el día que llamó a un orfebre mercedino para felicitarlo
Se trata de Pablo Falabella, de quien el entonces ministro ‘Wado’ De Pedro le entregó a Su Santidad en 2022 dos cruces durante una visita al Vaticano.
“Gracias por este gesto y por la calidad de su trabajo”, le dejo dicho el Pontífice al artesano en un mensaje de audio que en aquel momento difundió en exclusiva Radio Meridiano.
“Me llamó un sábado a la mañana, cuatro veces, pero no atendí porque estaba pintando, con las manos sucias, y además era un número desconocido, como esos que llaman para venderte algo”, le contó Falabella a la radio. Después de insistir, Francisco le dejó grabado un mensaje. “Para el señor Pablo Falabella, soy el papa Francisco. Le quiero agradecer la cruz que me mandó. Llamaré en otro momento, cuando me pueda atender. Muchas gracias por este gesto y gracias por la calidad de este trabajo. Que Dios lo bendiga”, se escuchó en la grabación.
Cumplidor, el papa argentino volvió a llamarlo el lunes, y esta vez sí conversaron. “Me llamó directamente él, no un secretario, él mismo, a las 9.40 hs., y volvió a felicitarme por la calidad de las piezas. Estaba muy contento. Fue un gesto muy grande de humildad el suyo al haberme llamado. Yo sentí una alegría inmensa al escucharlo, es un sentimiento difícil de explicar”, le contó el orfebre a Alberto Florella en el programa ‘Comunicación y Vida’.
Falabella realizó dos piezas completamente a mano a pedido del entonces ministro del Interior en las semanas previas a su viaje a Italia. “Wado está siempre muy presente y con su gestión logra cosas como esta”, dijo Falabella. Una de ellas es una réplica de la Cruz del Buen Pastor, la cruz pectoral del Papa, una imagen no muy común, de procedencia jesuita, en la que se lo ve a Jesús vivo y trayendo una oveja para su rebaño. Realizada en plata esterlina 925, con base de nogal, mide 12 centímetros de alto por 7 de ancho, y pesa 95 gramos.
La otra es una pieza de mayor tamaño, una cruz tradicional, en cuyo diseño y realización aportaron su talento artesanos de Jujuy, Catamarca y Buenos Aires. Esta fabricada “con materiales bien argentinos: plata y cuero crudo, sobre una base de madera de incienso torneada. Y fue presentada en un estuche espectacular”, describió el artista.
“Me temblaron las piernas cuando escuché el mensaje que Francisco me dejó grabado. Menos mal que no atendí, así me quedó ese registro en el que me nombra”, celebró. “El tema es que no le pude devolver el llamado porque figuraba como número desconocido”. Por suerte para él, dos días después el teléfono volvió a sonar.
