Una vez más impiden el paso vehicular en 30 bis y Ruta 41

La tranquera de caños blancos y dos hojas volvió a estar cerrada con candado este martes durante la mañana. Nadie sabe por qué razón ni quién toma una decisión tan arbitraria.

El viernes pasado, la unidad móvil de exteriores de Radio Meridiano anunció que en ese acceso a la ciudad había sido colocado un arco similar al que ya existe en la 34, que señala una altura máxima de tres metros para poder circular por esa calle de tierra.

Para entonces, la tranquera que había estado cerrada por mucho tiempo, que impedía el paso vehicular y enojaba a quienes necesitaban transitar por esa arteria, permanecía abierta, ubicada 20 metros antes del arco viniendo desde la ruta.

Meridiano había denunciado oportunamente que el cierre de la calle era una medida unilateral de los vecinos de la zona, fundada en supuestas razones de seguridad. Consultado por este tema, el secretario del área, Matías Maresca, argumentó que la venia para el bloqueo de la calle la había dado “la gestión anterior” (su antecesor Gonzalo Anselmo), pero que estaba viendo la posibilidad de colocar allí un lector de patentes como parte de las medidas de seguridad que reclama el vecindario.

Este martes, la situación volvió a foja cero dado que, aunque se colocó el arco, este no cuenta con lector de patentes ni fue levantada una garita de seguridad en el acceso (otra de las posibilidades que se barajaba), y la calle otra vez fue bloqueada con el cierre del portón con candado.

El arco llegó al barrio acompañado de tres carteles que anuncian la altura máxima de paso, y antes de la tranquera se ubica un cuarto cartel, de color amarillo, que reza ‘Calle cerrada’, que es de esperar que no haya sido colocado por la Municipalidad. Meridiano lo logró ubicar a Matías Maresca en el transcurso de la mañana del martes para conocer las razones de este nuevo cierre de la arteria.