Investigan la autenticidad del presunto anillo de San Martín hallado en el arroyo Pinazo

La sortija fue encontrada por un privado en el lugar donde existió una posta en la que el Libertador cambió caballos y pasó al menos una noche antes de participar de la batalla de San Lorenzo.

 

 

Si bien todavía no se avanzó en ningún estudio sobre la pieza, no hay registros de que el General utilizará anillos de ningún tipo, ni en cuadros ni en daguerrotipos. De todos modos, Mariano Ramos, docente de Arqueología y Antropología de la Universidad Nacional de Luján (UNLu), fue designado para realizar las pruebas que confirmen o descarten que el joya perteneció a San Martín.

Ramos todavía no tomó contacto con el bien hallado, que se encuentra a resguardo en el Instituto Nacional Sanmartiniano, en la Capital Federal. De todos modos, dijo que se trata de un anillo de oro y plata, de más de dos siglos de antigüedad. Sobre el lugar donde fue encontrado amplió que es un sector a la vera del arrogo Pinazo, que en la actualidad marca un límite natural entre los partidos de Pilar y José C. Paz. Allí descansaron las tropas de San Martín camino a San Lorenzo, en la provincia de Santa Fe. La posta funcionó entre fines del siglo XVIII y principios del siglo XIX.

“El anillo lo encontró un hombre provisto de un detector de metales y cometió el error de sacarlo del lugar, por lo que se rompió la relación de proximidad que pudo haber tenido con otras piezas enterradas. Para nosotros es un hallazgo fuera de contexto, que es como trabajar a ciegas en la escena de un crimen”, comparó Ramos. El docente lamentó que “quienes poseen detectores de metales a veces saquean los bienes arqueológicos, que en realidad pertenecen al Estado”. De cualquier modo, destacó que el autor del hallazgo se lo entregó a una vecina de la zona, la sra. Adriana García, que fue quien lo brindó para su estudio.

Ramos, un profesional con 35 años de labor en la UNLu, prevé usar para el análisis de la sortija el mismo procedimiento que se utilizó para estudiar parte de las históricas cadenas de la batalla de la Vuelta de Obligado, de cuyo hallazgo (el 7 de junio de 2020) y posterior estudio de autenticidad también participó.